Explicaciones naturales para lo sobrenatural
Cerca del 85% de la población mundial se identifica con una religión u otra. Por lo tanto, la inmensa mayoría de los seres humanos, miles de millones de personas, cree en la existencia de lo sobrenatural, una realidad que no responde a las leyes de la naturaleza. Y una vez abierta la puerta al mundo espiritual, muchas cosas son posibles: almas que viajan al más allá, que regresan a la esfera terrenal o quedan atrapadas en ella, y que pueden interferir con nuestro mundo a través de apariciones, voces u otras manifestaciones.
La ciencia no puede demostrar la inexistencia de todo esto; aunque a menudo se discute si el método científico puede o no probar una negación, en cualquier caso la propia definición de lo sobrenatural excluye esta posibilidad. Sin embargo, hay algo que la ciencia sí puede hacer y ha hecho: aportar explicaciones naturales a los supuestos fenómenos sobrenaturales.
Las décadas de 1960 y 1970 fueron una edad de oro para los sucesos paranormales, la época en la que este campo trató de encontrar un encaje científico. Universidades prestigiosas albergaban laboratorios de parapsicología, e incluso Nature daba cabida a una investigación sobre los supuestos poderes mentales del mago Uri Geller, que se hizo famoso por su supuesta habilidad de doblar cucharas con la mente, junto con un editorial justificando su publicación. Pero aunque sería discutible si el interés popular por todo ello ha decaído, lo cierto es que sí lo hizo gran parte del empeño científico en esta línea, ante la falta de resultados convincentes. Y paralelamente, la ciencia ha ido encontrando posibles explicaciones normales a lo paranormal.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario